Las razones hace tiempo se extinguieron, no hay si o no que valga.
Lo que ella cree ser su instinto, su constante ira e insatisfacción, la llevan por todos los caminos.
Perdida.
Muerde sin hambre, ataca sin sed. No la mires, no la toques, te va a doler.
Entre su absurdismo de serpiente sin instinto y su irracionalidad de persona con fuerte personalidad, nadie puede contra su verdad.
Quemamos tiempo con palabras, envenenamos nuestro amor, le dimos lluvia a la inundación y prendimos fuego el mar.